Las fluctuaciones cambiarias se pueden ver afectadas por factores políticos y económicos, incluyendo disturbios civiles, cambios de poder, inflación y muchos otros.
Tipos de riesgo cambiario
Hay tres tipos principales de riesgo cambiario: riesgo de transacción, riesgo de conversión y riesgo económico.

1. El riesgo de transacción es el riesgo que enfrentan las empresas que compran bienes de otro país en una moneda extranjera. Si la moneda nacional del vendedor se aprecia en relación con la moneda nacional del comprador, el comprador sufrirá pérdidas financieras, ya que tendrá que pagar más en su moneda nacional para alcanzar el precio acordado. Por lo general, este riesgo afecta solo a una parte de la transacción, la que se realiza en moneda extranjera. No existen estos riesgos para las empresas que operan en su divisa nacional.
2. El riesgo de traducción afecta a las empresas que tienen sucursales o filiales en otros países. Por ejemplo, supongamos que la oficina central de una empresa está situada en Alemania, mientras que su filial está en China, y la filial realiza transacciones en yuanes, mientras que la empresa matriz en Alemania presenta todos los informes financieros en euros. Si el yuan se aprecia frente al euro, los estados financieros se desajustarán al convertirse de yuanes a euros. La empresa sufrirá, en consecuencia, una pérdida debido al cambio en la tasa de cambio.
3. El riesgo económico también se conoce como "exposición operativa". Este es el riesgo a largo plazo que afecta los informes financieros, las ganancias de la empresa, los precios de las acciones, las inversiones e incluso el valor de mercado de una empresa. Ocurre debido a fluctuaciones cambiarias inesperadas. Las grandes empresas con oficinas en diferentes países están particularmente expuestas al riesgo económico. La globalización aumentó el riesgo económico para todas las empresas.
¿Cuáles son las causas del riesgo cambiario?
No es posible mitigar la volatilidad del tipo de cambio por completo. Saber qué lo causa te da una ventaja a la hora de planificar inversiones. Varios factores pueden causar riesgo cambiario.
Los cambios económicos afectan aspectos como la inflación y el PIB (producto interno bruto). Por ejemplo, cuanto más alto sea el PIB de un país, más estable será la economía del país y, por lo tanto, más atractivo será el país para los inversores. Una economía estable conduce al fortalecimiento de la divisa nacional, ya que las exportaciones se volverán más caras en este país y las importaciones serán más baratas. Este factor afecta en gran medida a las empresas que operan en el mercado internacional.
Las acciones gubernamentales y la inestabilidad política se refieren a los cambios realizados por el gobierno de un país. Estos podrían ser cambios en los aranceles de importación-exportación, en la geopolítica o impuestos. Cuanto más inestable es el panorama político del país, más inversores abandonan el barco y, por lo tanto, más débil se vuelve la divisa nacional.
El incumplimiento de la contraparte ocurre cuando la otra parte en una transacción internacional no realiza el pago requerido. Esto también se conoce como riesgo crediticio. Las actividades comerciales de las contrapartes deben ser monitoreadas para que las transacciones comerciales se cierren en el momento adecuado sin riesgo de incumplimiento.
Cómo gestionar el riesgo cambiario
El objetivo principal de una estrategia de gestión de riesgos en el mercado de divisas es proteger las ganancias y los flujos de efectivo de la empresa o individuo frente a la volatilidad de los tipos de cambio. Todas las técnicas de cobertura pueden dividirse en dos grandes grupos: internas y externas.